Cómo lograr una panceta perfectamente crocante por fuera y jugosa por dentro

El secreto está en el proceso

La panceta perfecta no es cuestión de suerte, sino de técnica. Aquí te explicamos cómo lograr el equilibrio ideal.

Paso 1: Secar bien la piel

La humedad impide que se forme la crocancia. Seca la panceta con papel de cocina y, si puedes, déjala destapada en la nevera varias horas.

Paso 2: Cocción lenta primero

Horno a 150–160 °C durante 1,5 a 2 horas para fundir la grasa lentamente.

Paso 3: Golpe de calor final

Sube a 220–230 °C por 10–15 minutos para que la piel se infle y quede crujiente.

Errores comunes

• Temperatura alta desde el inicio.
• No secar la piel.
• Cortar inmediatamente al salir del horno.

Conclusión

Paciencia, calor gradual y buen producto. Con la panceta de Lomarosa, el proceso se vuelve más predecible y el resultado, espectacular.