Criamos abejas para preservar la biodiversidad de la Orinoquía colombiana:
La riqueza de los bosques nativos es lo que nos permite tener fuentes de agua pura, diversidad de flora y fauna, mantener la vida propia de la altillanura oriental y la salud del suelo. Por eso, para nosotros es muy importante garantizar la conservación de los ecosistemas. Nos dimos cuenta del rol fundamental que tiene la abeja en la biodiversidad, y decidimos criar abejas para preservar la biodiversidad de la Orinoquía colombiana.
Cuando la abeja toma el néctar de la flor, su cuerpo se impregna de polen que transporta desde la parte masculina de una flor a la parte femenina de la misma, o de otra flor, permitiendo que éstas sean fertilizadas y las plantas se reproduzcan; este proceso de transferencia de polen se conoce como polinización.
Nuestra miel multifloral, de matiz ámbar y sabor único, es la muestra del tesoro biodiverso que tenemos en la región y el resultado de cientos de plantas polinizadas que producirán frutos, semillas, y flores preciosas.
Campo bien hecho, cerdos bien criados
